Sangiovese

Sangiovese significa literalmente “sangre de Júpiter”. Es una cepa que precisa cuidados en cuanto a emplazamientos, clones y producción. Le gusta el clima cálido y es necesario controlar su vigor. Es una variedad de maduración tardía. Posee una acidez elevada, rica en taninos pero de color poco sólido; y no ha producido vinos importantes fuera de Italia.
Existen alrededor de 14 variedades de uva Sangiovese. Entre las más famosas se encuentran la Brunello y la Prugnolo Gentile, que son uvas que crecen mejor en alturas bajas porque la piel o cáscara tarda más tiempo en madurar.

Las uvas Sangiovese son violetas, de piel gruesa, muy ácidas, de contenido tánico moderado o alto. Su maduración es tardía. Aportan aromas frutales, florales y especiados al vino, aunque éstos pueden ser fácilmente opacados en los blends tintos si las uvas utilizadas no son de la mejor calidad.
La variedad Sangiovese se utiliza principalmente para elaborar vinos tintos de cuerpo medio a alto, de estilo italiano tanto Normale como Riserva (mejor calidad, mayor vigor). Constituye el componente principal del vino Chianti y del vino Sangiovese di Romagna DOC (al menos 85% Sangiovese), demandan un maridaje con bistecca alla fiorentina, carnes asadas, hígado de ternera, setas porcini, guisos, pizza y platos sustanciosos de pasta, en fin casi de todo con salsa de tomate y queso pecorino.